Este proyecto tiene como finalidad combatir el bajo consumo de frutas y hortalizas de los niños incrementando de forma duradera la proporción de frutas y hortalizas de la dieta infantil en una etapa en la que se están creando sus hábitos alimentarios.

Con este programa se pretende invertir la tendencia hacia una disminución del consumo de frutas y hortalizas, garantizando un alto nivel de protección de la salud humana y fomentando la competitividad del mercado orientándolo hacia una dieta sana y equilibrada

Este plan está financiado por la Unión Europea y la Comunidad Autónoma.

La frecuencia establecida para el reparto de fruta a los niños es de 3 veces/semana.